Por Daniela Conil

El caso de Ángel Yerdeo no deja de conmocionar a la provincia, no solamente por el final fatal del joven, sino por el motivo que lo inició todo: un engaño por redes sociales, una modalidad que está al top en la lista de formas que tienen los delincuentes de robar o estafar a las personas. 

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Desde el comienzo de la pandemia en el año 2020, esta modalidad de estafas se ha hecho cada vez más frecuente en redes sociales, principalmente en Facebook y su sección de ventas: Marketplace.

El Jefe de delitos económicos e informáticos de la provincia de Mendoza, Osvaldo Araujo, comentó a ADN País que se reciben alrededor de tres denuncias por semana por diferentes modalidades de robos y estafas a través de internet y telefonía, que van desde el cuento del tío hasta la venta de un producto inexistente o el alquiler de una localización trucha. 

Según detalló Araujo, la mayor cantidad de reclamos por robos o estafas llegan por la compra-venta de teléfonos, alquiler de cabañas, departamentos, inflables, salones de fiesta, entre otros. 

Por su parte, el fiscal de delitos económicos y tecnológicos,Javier Pascua, dialogó sobre el crimen de Ángel Yerdeo con Aurora 91.3 y destacó que este tipo de casos de robos por compra-venta "ha crecido, y lo ha hecho de manera importante con el avance de la tecnología y el aumento de la pobreza". 

"La situación crece en Mendoza a diario, no con hechos de crimen o violencia, sino que crecen las estafas. Se cometen robos en algunos casos, pero por lo general se cometen muchas estafas con depósitos falsos", amplió el fiscal. 

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En tanto, aseveró que muchas de estas estafas son pensadas y hasta ejecutadas por internos de las cárceles de Mendoza debido a la falta de control que existe con respecto al uso de celulares que tienen los delincuentes dentro del penal. 

"Tenemos muchas investigaciones de que las estafas y los robos se planean desde el penal y se ejecutan por terceros desde afuera, por eso tiene que haber un control de los celulares de los internos. Hay internos hasta con 10 chips distintos, ¿para qué los pueden querer si no es para hacer delitos?", cuestionó Pascua. 

Pascua, culminó: "Hay que ponerse a trabajar con estas cosas que tienen cansada a la gente.  Son las cosas que nos salvan la vida".